miércoles, 30 de enero de 2013

Amor mío, ya no eres mi amor...

Mi amor, tienes que saber que me cansé de engañarte...
me cansé de hacerte creer que me tenías engañada.

Estos últimos meses me agotaste tanto física como emocionalmente,
y todo por tus juegos y no aceptar la realidad de tus sentimientos...
Llegó el día en el que te dije todo, y aunque no lo esperabas oir, ya no había marcha atrás.

Sé perfectamente bien lo que planeas, aunque sabes que no será como estar juntos,
te deseo suerte con esta nueva víctima, que te salga tan bien como te salió conmigo.
Espero en verdad que ella sí siga tu juego y pueda hacerte igual de feliz que yo, aunque sinceramente lo dudo.

No sé por qué llegamos a conocernos tanto, a ser tan iguales, ése fue nuestro problema.
Jamás negaré que fuiste el amor de mi vida, y que siempre te voy a querer, pero nuestro tiempo compartido se acabó, y no queda más que tomar otros caminos que nos ahora nos convienen más a ambos.

Esto no es una despedida definitiva, nuestros caminos siempre estarán unidos por lo mismo que nos unió hace un tiempo atrás... hasta entonces, mi amor.